Imaginar que has de
“bucear un kilómetro hacia fríos y oscuros abismos submarinos
para cazar a tus presas, aguantando la respiración y soportando una
presión de cien kilogramos por cada centímetro cuadrado de tu
cuerpo. Imagina que tardas una hora en encontrar las presas
suficientes para mantenerte: unas treinta por inmersión. Imagina por
tanto que acometes las proezas de buceo de un Cachalote de 14-60
toneladas con un cuerpecito de una a tres. Si haces todo esto,
bienvenido, eres un miembro de la familia Ziphiidae, y
probablemente tienes un cuerpo exquisítamente adaptado a llegar al
límite de tus capacidades fisiológicas, lo que te puede hacer
vulnerable a estímulos si te hacen cambiar el comportamiento que te
permite estos profundos excesos”. Este texto de Natacha Aguilar de
Soto (Grupo de Investigación BIOECOMAC) explica muy bien lo
extraordinario de estos seres tan raros como esquivos... los zifios.
Pero qué son los zifios?
Pues son todas las especies de la familia Ziphiidae... unas 20. Como
suelo denominarlos en las charlas... son algo así como delfines del
tamaño de una ballena pequeña. Y por qué son tan desconocidos?
Pues porque viven muy alejados de tierra, en aguas muy profundades de
más de 600 metros y encima son extremadamente desconfiados. Así que
verlos de cerca muchas veces se convierte en una lotería...
Esta constumbre de
intentar pasar desapercibidos al ojo humano los convierten en los
cetáceos más difíciles de ver y de identificar. Así que salvo las
dos especies que vamos a tratar en esta entrada, los zifios son los
mamíferos marinos más desconocidos y menos estudiados del mundo
animal.
En la mar todo lo que se
ve no es siempre lo que parece. Y más si lo que buscamos son
cetáceos como los zifios. Por qué?... porque los vemos por lo
general sólo unos pocos segundos fuera del agua y muchas veces las
condiciones de luz no son buenas, o el angulo no es el más
apropiado, o la distancia es mayor de lo deseada... lo que dificulta
su correcta identificación. De forma que asegurar el avistamiento de
una especie de estas características sólo basándose en una
observación directa, y sin fotografías, es cuanto menos
precipitada.
Si los vemos de cerca y
con buenas condiciones de luz... no tenemos problemas. Así que vamos
a empezar a presentaros los protagonistas de esta entrada... con
estas condiciones.
El Calderón de Hocico
Boreal (Hyperoodon ampullatus) es un gran cetáceo de 8 a 10
metros de longitud y hasta 8 toneladas de peso. De cuerpo robusto y
pico largo la frente es muy abombada. La aleta dorsal es grande,
falciforme y acabada en punta.
Macho de Calderón de
Hocico Boreal (Hyperoodon ampullatus)
Hembra de Calderón de
Hocico Boreal (Hyperoodon ampullatus)
Aleta
El Zifio de Cuvier
(Ziphius cavirostris) es un cetáceo que llega a medir hasta 7
metros y pesar 3 toneladas. El pico es corto, denominado de pico de
ganso, sin embargo la frente es algo abombada. De hecho la línea que
une la frente con el pico presenta una suave inclinación. La aleta
dorsal es relativamente pequeña y falciforme.
Macho de Zifio de Cuvier
(Ziphius cavirostris)
Hembra de Zifio de Cuvier
(Ziphius cavirostris)
En septiembre tuvimos una observación cuanto menos curiosa. Un grupo de cuatro zifios nadando a pocos metros de nuestro barco... pero siempre de espaldas a nosotros. Tras la primera inmersión los relocalizamos casi 25 minutos después desde el mismo ángulo. En un principio identificados como cuvieres.... pero después en tierra y viendo las fotos parecían boreales.... entonces que habíamos visto?
Y es que la cosa cambia
sustancialmente si los vemos con malas condiciones de luz e incluso
ángulo. Por ejemplo en estas instantáneas la característica forma
angulosa de la frente ó mentón de los Cuvieres parecen tornarse
abombada como los juveniles Boreales... la cosa se complica si los vemos sólo de espaldas.
Parecen Calderones de Hocico Boreal, pero es que la confusión crece
cuando incluso a uno se le aprecia el pico que parece más largo de
lo habitual.
El mismo ejemplar visto,
una semana antes e identificado por que tiene las mismas marcas que
el de la discusión, y de cerca nos saca automáticamente de
dudas.... Cuvier.
Aquí tenemos la forma
redondeada de un Hocico Boreal. Muy diferente al del Cuvier.
En cuanto a las aletas...
que parecían muy altas para Cuvier, también puede traernos a
confusión. De hecho vemos que hay muchas variaciones en el tamaño
de las aletas en las dos especies, algo que siendo estricto con las
guías, pueden traer a confusión y no es determinante para una
correcta identificación.
Aqui parece que se trata
de una aleta muy grande tipo Calderón de Hocico Boreal.
A continuación vais a
ver distintos tamaños de aletas.
De menor a mayor en el
caso de los Zifios de Cuvier
Y de mayor a menor en los
Calderones de Hocico Boreal
Así que como podéis
comprobar, y eso que en teoría son dos especies inconfundibles, la
cosa se torna muchas veces complicada. Además es muy común oir a
los observadores de fauna que los cetáceos es de lo más fácil a la
hora de identificar porque en comparación con las aves o los
insectos... son muchas menos especies. Gran error. Y es que en la
mar todo lo que se ve no es siempre lo que parece.
Espero que os haya sido
interesante.
Para finalizar los participantes con los que se ha inspirado esta entrada
Yasnaya Polyana, María Llorente Corcobado, María del Mar Labrador, Aimara Planillo, Tamara Díez, Beatriz Vigalondo, Olga Díaz Pastor, Mario Moreno, Pablo de La Nava, Alvaro Díaz Pastor y Mr G... Luis Mari Urtiaga.
Un saludete
Gorka Ocio